martes, 31 de enero de 2012

CAPITULO EXTRAORDINARIO DE LA COFRADIA DE BALLESTEROS DE LA VERA CRUZ CONMEMORATIVO DEL VIII CENTENARIO DE LA BATALLA DE LAS NAVAS DE TOLOSA Y DE LA TOMA DE VILCHES

CAPÍTULO EXTRAORDINARIO
Siendo las 11:00 horas del dia 21 de enero de 2012, en el histórico Sitio del Sacro Convento de Calatrava La Nueva se procede a la apertura del Capítulo Extraordinario de la Cofradía de Ballesteros de la Vera Cruz, conmemorativo del Octavo Centenario de la Batalla de Las Navas de Tolosa y de la Toma de Vilches.
La Cofradía de Ballesteros de la Vera Cruz y yo, su Maestre, quieren agradecer la presencia de todos los asistentes a esta Solemne ceremonia.gradecemos la presencia del Sr. Alcalde Miguel Morales, Coordinador Provincial de la Consejería de Cultura, Educación y Turismo de la Junta de Comunidades de Castilla La Mancha y alcalde del Aldea del Rey, así como las gestiones realizadas para poder venir a su casa.
El objeto de celebrar este Capítulo en el Sacro Convento de Calatrava es el de resaltar los extraordinarios y ancestrales vínculos existentes entre los miembros de la Orden de Calatrava y los miembros de la Cofradía de Ballesteros. Para eso, desde Vilches hemos venido a la Casa de la Orden de Calatrava, hemos regresado a nuestros orígenes, hemos vuelto para honrar a los monjes caballeros que lucharon valientemente en la Batalla de Las Navas de Tolosa.
Tras la Batalla de Las Navas de Tolosa, el rey de Castilla, Don Alfonso VIII, encomendó la tarea de conquistar y tomar la plaza fuerte de Vilches, ya que los fugitivos que se habían salvado de la batalla, tomaron el camino de la cercana fortaleza de Vilches, distante tres leguas, buscando refugio en el mismo. El encargo de realizar tal tarea recayó en el Maestre de la Orden de Calatrava, Don Rodrigo Garcés de Aza, y en los monjes calatravos, dando cumplida orden a tal encargo a los tres días de la batalla y permaneciendo desde entonces la Villa de Vilches en poder del Reino de Castilla y siendo el límite fronterizo meridional de la Corona de Castilla durante largo tiempo.
Los monjes calatravos, artífices principales de la conquista, permanecieron en la villa para su custodia. Para su mejor defensa, se creó un cuerpo militar al que se le encomendó además la tarea de guardar y protegerlos.

 ¡AY CALATRAVA!   por Antonio González Palomeque
jé atrás las colinas
Y los leves altozanos;
tierras de vides y olivas,
rojas hazas de los llanos.
Seguí el borde de Castilla
Con sus lomas y llanuras.
Pasé sus tierras de arcilla
Llegué a las lomas oscuras.
Al fin, pasé el “Calatrava”
Con sus dos cerros fronteros:
“El Convento” y la “Atalaya”
los dos castillos guerreros.
¡Ay Calatrava la Nueva,
de Salvatierra a tu cerro,
se llevó Martín Fernández
los calatravos guerreros!n paisaje fuerte y rudo
de riscas y pedregales
de retamas y jarales
y farallones ceñudos.
Desnudos cerros en frente
de una vaguada grosella;
cruza la campiña aquella
del Ojailén la corriente.
Es su lejano horizonte
oscura línea imprecisa.
Cielo azul y negros montes
A lo lejos se divisan.
¡Ay Calatrava la Nueva
la de los cerros desnudos;
El tiempo todo se lleva,
también llevó tus escudos!
s gláucas, agrietadas;
debajo matas oscuras,
y coronando la altura
las paredes coloradas.
Del Castillo, líneas rectas
con sus aristas agudas.
Sobre el cielo se proyecta
cuadrangular estructura.
A su frente, Salvatierra
dominando el “Calatrava”;
a los cerros de la Sierra,
a la apacible vaguada.
¡Ay Calatrava la Nueva
yaces medio abandonada.
Sólo tus paredes quedan
y tus torres almenadas!
ra Morena
habláis un pasado fiero.
Un pasado con guerreros
coronando las almenas.
Un pasado de vigilias
en constante centinela.
Calatravos en familia
con las armas siempre en vela.
De esforzados luchadores
en las Navas y el Salado.
Guerreros conquistadores
de castillos y poblados.
¡Ay Calatrava la nueva
la de los guerreros blancos.
Rojas cruces de Lis llevan
en las mangas de sus mantos!e Calzada a Puertollano
paralelas van las Sierras.
Ambas con crestas de piedras;
en medio, terreno llano.
Dos Castillos, cabeceras
de una serie de altozanos;
negros cerros en hilera
que llegan a Puertollano.
Las riscas y las malezas
rodean a tus cimientos.
Dónde está tu emplazamiento
el “Cobo” era fortaleza.
¡Ay Calatrava la Nueva
A
tu Norte, “Castilviejo”.
Y tu cerro Alacranejo
sobre el Puerto del Fresneda!


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